Digo a mis estudiantes, a los quejicas, que se asomen al
mundo. Algunos, los hijos de inmigrantes, verbalizan por qué se fueron sus
padres de su país de origen. Nadie, como dijo Kundera, se marcha de su lugar de
origen si es feliz.
Entre las desgracias que asolan a este país está la muerte prematura de algunas de sus cabezas mejor amuebladas. Al igual que a Camus, al que la muerte sorprendió con 47 años en un absurdo -siempre es absurdo- accidente de tráfico, en España hay dos intelectuales que perdieron la vida antes de tiempo (siempre es antes de tiempo) a los que hoy recuerdo.
Uno de ellos fue Alfredo Deaño, profesor de lógica. Con su
muerte siempre prematura en 1978 la filosofía se quedó sin una realidad -no era
una promesa- que aún tenía todo su recorrido intelectual por delante. Su libro
sobre lógica formal sigue siendo un referente al que todos los estudiantes
hemos acudido. Un infarto de miocardio se lo llevó antes de cumplir los 34.
Unos años antes (1964) falleció Luis Martín Santos,
importante psiquiatra y novelista en un tiempo en que la psiquiatría no tenía
apenas prestigio ni talentos y mucho menos medios. Escribió la excelente Tiempo
de silencio, de la que también existe película. Ambas tengo que
revisitarlas. Nació tal día como hoy, en 1924. Como Camus, un absurdo accidente
de tráfico se lo llevó antes de cumplir los 40.
Todas sus vidas y su obra dejaron poso. Las nuevas
generaciones no pueden ignorar que España también ha dado talentos a los que
hay que seguir honrando. Porque eso es recordar.
Noticia sobre la muerte de Alfredo Deaño:
https://elpais.com/diario/1978/01/26/cultura/254617207_850215.html
Biografía de Luis Martín Santos:
https://www.buscabiografias.com/biografia/verDetalle/1580/Luis%20Martin%20Santos
Procedencia de las imágenes:
https://www.escritores.org/biografias/924-martin-santos-luis
https://fosacomun.wordpress.com/2018/01/24/alfredo-deano-logico-30-anos-despues/