Miro el blog y me doy cuenta de que hace casi un mes que no escribo nada. Hay muchas casusas. En primer lugar ese intensísimo y doloroso trabajo que me fuerza más allá de mis pobres energías; sobre todo con una burocracia inútil que me vacía las pilas y llena el hueco con ansiedad. Fui a mi médico y llevo un tiempo tomando esos fármacos que apenas conocía antes y que alivian inútilmente porque van al síntoma y no a la causa. He pedido una reducción horaria y me la han negado.
Después, esta maldita pandemia, que tiene a mucha gente lejos
y que me ha alejado de otros. O me he alejado, no sé, es posible.
Pero he leído. Veo que he leído dos libros de Sara Mesa (Un
amor y Cuatro por cuatro), tres de Víctor del Árbol (La tristeza
del samurái, Respirar por la herida y El peso de los muertos),
una excelente novela negra del danés Soren Sveistrup, El caso Hartung, y
una novela gráfica que recomiendo, Clara Campoamor, de Rafael Jiménez
Meik.
He salido al campo, me gusta y me reconforta. Ahora hace frío,
este frío seco castellano que no se acaba de marchar. Tengo ganas de volver, de
ir a ciudades que no conozco, de hablar sin prisa en un bar, de conducir hacia
lugares en los que alguien me espera, de volver a dormir bien y de tirón.
Y supongo que nada de lo que cuento es más importante de lo
que hace o le pasa a la mayoría. Feliz domingo a quienes pasáis por aquí a veces.
https://www.youtube.com/watch?v=lbjZPFBD6JU
Procedencia de la imagen:
https://elpais.com/elpais/2015/01/05/icon/1420443241_637329.html
¡Feliz domingo, Atticus!!
ResponderEliminarsiento que estés pasando por malos momentos de estrés, de ansiedad, en realidad son malos momentos para casi todos, pero está claro que para unos más que para otros. Tu trabajo es de los pocos agradecidos, siempre he pensado que es de los que exige mucho pero te da poco a cambio (y con ese poco no me refiero a las satisfacciones que seguramente tendrás de vez en cuando por haber conseguido logros con los alumnos) Me parece alucinante que te hayan denegado reducción horaria, ¿ni siquiera con un justificante de tu médico? Y la maldita pandemia, que nos tiene a todos alejados de todo y de todos. Que ganas de volver a la vida de antes, espero que no tarde demasiado.
Respecto a los libros leídos, me gustaría saber si te gustó el de Sara Mesa, a mi me gustó mucho (me encanta esa autora aunque el de Cuatro por cuatro no lo he leído) y alguna de Víctor del Arbol también he leído
Espero que todas esas cosas de las que tienes ganas, poco a poco las vayas recuperando. A mi también me reconforta el campo, últimamente me ha dado por hacer rutas en bici de montaña y la verdad es que también me reconforta hacer deporte y al mismo tiempo hacerlo en el campo
Un beso enorme!!
Los domingos son felices, razonablemente. La ansiedad viene y va. Hoy está siendo un buen día, espero que el sueño acompañe. No soy un caso especial, veo mucho a mi alrededor e imagino que muchos estarán peor que yo, que, de momento, hago vida corriente, al menos todo lo que puedo. Es verdad que algunas clases compensan, tengo unas pocas estupendas, pocas, menos que otros años.
ResponderEliminarPues mi médico ni baja ni nada. Y la administración recurre a lo de "necesidades del servicio", la verdad es que en muchas asignaturas no hay profesores en bolsa de trabajo.
Me gustó mucho "Un amor". No tanto el otro, lo encontré como a medio construir. Pero "Un amor" me pareció tan extraño como creíble, probablemente el ser humano sea así, imprevisible, malvado a veces, resentido y esperanzado. Sí, me gustó mucho.
Y pronto cogeré la bici de nuevo, hoy llueve. Gracias por tus palabras.
¡Hola de nuevo!!
ResponderEliminarQue bien coincidir en lo de "Un amor" (he leído que el otro, como a ti no gusta igual, supongo que la autora se va haciendo con el tiempo, normal). Y mira..., también te gusta la bici, yo suelo cogerla tres veces por semana y me viene bien tanto para el cuerpo para la mente (necesito hacer ejercicio) e imagino que te vendrá bien a ti también para liberar ansiedad
Lo de las "necesidades del servicio" es tremendo, en mi trabajo también andamos bajo mínimos, gente interina que se va a ocupar otras plazas, gente que se jubila y ya no se mete a gente nueva porque ya no queda bolsa de la que tirar..., en fin, un asco. Pero bueno, me considero privilegiada por tener curro y encima que me guste (aunque en estos tiempos de pandemia ya no es lo mismo, hay que adaptarse)
Más besos
Me viene muy bien, desde luego: aire libre, ejercicio... Lo que mejor me vendrá es el 30 de junio.
EliminarPor cierto, tener trabajo no es un privilegio, sino un derecho. Y veo continuamente que a los que ejercemos ese derecho nos sobrecargan, con lo cual prescinden de otros: más paro, menos derechos laborales y trabajo peor hecho. Pero lo llaman libertad...
Bueno, feliz sábado y siempre gracias por tus comentarios.
Pues sí, Atticus, tienes toda la razón, es un derecho, no un privilegio, pero curiosamente, viendo el panorama que nos rodea, los que lo tenemos, nos sentimos como privilegiados (también es cierto que al menos en mi caso y supongo que en el tuyo, nadie me regaló nada, tres años estudiando una oposición no es moco de pavo). Y ese es el problema, que sobrecargarnos significa quitarle a otros su derecho. Una pena...
EliminarFeliz domingo!!!
Totalmente de acuerdo con tus palabras, Atticus. Precisamente ahora estoy haciendo labores administrativas, y ayer, lo mismo, durante horas. Esto es un no parar.
ResponderEliminar¡Qué lástima el tiempo perdido en burocracias innecesarias!, y lo que mejoraríamos todos, sobre todo los alumnos, si pudiéramos utilizar dicho tiempo en mejorar sobre los conocimientos propios de nuestra materia
Mucho ánimo con todo y espero que pronto vuelvas a la escritura.
Un abrazo.
Muchas, demasiadas. Estamos sometidos a un auténtico acoso burocrático que no mejora nada y empantana nuestra profesión. Somos docentes, no papeleros. Gracias siempre, abrazos.
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