Deja mal cuerpo. No tanto por la brutalidad como por la fealdad de una sociedad que se parece a la nuestra.
Porque hemos construido un relato, seguramente falso, muy falso, sobre el paraíso escandinavo. Pero lo que se nos muestra en esa serie es una sociedad con profundos desconchones, derechos sin deberes, drogas, ningún respeto, arrogancia y soberbia.
Estoy viendo el último episodio de los seis que tiene esta tercera temporada y pienso que habla de la tristeza. Unos policías, personas como cualquiera de nosotros, se sienten desbordados, conocen la realidad y presentan las mismas debilidades que cualquiera. Algunos renuncian a la ilusión mientras otros cumplen kantianamente su cometido.
Los últimos minutos me gustan, tal vez para no arrojarnos solo la desazón a los ojos. Son unos minutos de esperanza, un brillo puede que fugaz. Pero es que también somos eso, la vida no es solo devastación y mugre, también hay en ella personas buenas y razones para la ilusión.
Tráiler:
https://www.youtube.com/watch?v=3QreSg6YHlg
Procedencia de la imagen:
https://cinemagavia.es/la-delgada-linea-azul-serie-estreno-filmin/
¡Hola Atticus!
ResponderEliminarme gusta vy atrae lo que cuentas de esta serie que retrata la sociedad sueca, de ese supuesto paraíso escandinavo que seguramente tenemos en nuestra cabeza y que como dices puede que sea erróneo, idealizado. Me gusta saber que el final de la serie te ha dejado buen sabor de boca, que te ha gustado y te ha transmitido cierta esperanza, ya que es cierto, que por suerte en este mundo hay de todo, mucha maldad pero también buena gente.
He visto que está en Filmin y la acabo de meter en mi lista para ver en el futuro, no creo que tarde mucho
¡Gracias por dármela a conocer!!
¡Feliz verano!!!
Besos!
¡Buenos días, Marian!
EliminarHe leído mucho a los autores (y autoras) suecos. Si lo que dicen es verdad, la serie es fiel a esa realidad. Conozco a una psiquiatra que trabaja allí y cuenta cosas parecidas. Nada es perfecto y seguramente ellos envidian una sociedad como la nuestra. conviene no ser chovinista, pero tampoco romantizar culturas ajenas.
El final me sorprendió sí, el de las dos temporadas anteriores era más duro. Y, por supuesto, en el mundo hay de todo, lo que ocurre es que la maldad es muy ruidosa y destructiva y la virtud suele ser silenciosa y discreta (de lo contrario es propaganda).
Feliz verano a ti también. Besos.