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sábado, 21 de julio de 2012

CRÓNICAS NEOYORKINAS 3

“Yo no podré quejarme
si no encontré lo que buscaba:
pero me iré al primer paisaje de humedades y latidos
para entender que lo que busco tendrá su blanco de alegría
cuando yo vuele mezclado con el amor y las arenas”.

Federico García Lorca: ”Poema doble del Lago Edem”, incluido en el libro Poeta en Nueva York


Algo que hay que ver, sin la menor duda, es una misa gospel. Mi amiga cordobesa, que es chica lista y había estado hace un año, nos recomendó ésta: The Abyssinian Baptist Church (132 Odell Clark Place, W 138th St, NY). En  Harlem, of course.

Un taxi te pone rápidamente allí. Conviene estar a las 9 de la mañana, aunque la misa empieza a las 11 porque el espacio para visitantes es limitado, aunque conté casi 300. Una vez en la cola no paran de aparecer negros elegantemente vestidos, diciendo a los que esperamos que no se puede entrar en pantalón corto, ni con tirantes, ni enseñando los talones. A mí el tono me pareció un tanto imperativo, pero de lo demás… al fin y al cabo es su casa. A una de las chicas le dijo en voz más suave que iba muy adecuada para la casa de Dios, no como las demás, que parece que van a la playa.

En el rato que estuvimos esperando me di una vuelta por los alrededores: la población es de raza negra con algún que otro latino; los blancos (wasp), brillan por su ausencia, excepto en las inmediaciones de la iglesia. Nos hacen ponernos en fila de a dos. Mientras esperamos vemos pasar a los vecinos, absolutamente endomingados, camino de la iglesia. Entran ellos; después nosotros. Ellos van a la planta baja, nosotros en  la parte alta. Me recuerda, pero al revés, esa escena de Matar a un ruiseñor de la que ya he hablado. La misa es algo rara para un católico: se ofrecen un par de recién nacidos a la comunidad (lo más parecido es lo que se hace en El rey león, que tal vez tomó de aquí su ejemplo). Los que entienden inglés dicen que el sermón está muy bien, conciliador, dialogante, todas las personas tiene algo bueno, todos somos hermanos… A mí lo que me interesa es el coro que, tras los oficiantes, canta divinamente (nunca mejor dicho).

Prohibido hacer fotos, prohibido filmar. Si alguien es sorprendido será expulsado. Por eso no tengo ninguna imagen propia del evento, así que pongo algo de gospel que no corresponde al coro de esa iglesia. Pero es mejor verlo y escucharlo en directo, con unas maravillosas voces solistas masculina y femenina y un nutrido grupo de todas las edades. La gente baila en la misa, da palmas. Poco católico, de obligada visita. Y gratis, apenas el óbolo que hay que dar cuando pasan la bandeja, que aquí es una gran fuente dorada. Vamos, un regalo.



Al terminar, corriendo a Silvia’s, restaurante de comida sureña, estupendo, en el que los turistas nos dejamos conducir por los dueños (negros, claro). Sigo teniendo la impresión de que aquí mandan ellos, que los blancos somos la rareza, que ellos están orgullosos de su música, de su comida, de su barrio de casas bajas y amplias avenidas. Y que nos dejan venir.

Así que acudid en cuanto podáis.

15 comentarios:

  1. ¡Aleluya! Una misa désas debe de ser nice thing.

    No me extrañan las exigencias vestuarias, ellos y ellas van con esas túnicas cuasiburkianas. A estas iglesias debemos algunas voces (negras) majestuosas.

    Lo de las plantas arriba/abajo también me lleva, inexorablemente, a aquella conmovedora secuencia de “Matar a un ruiseñor”. Justicia poética, blanquitos.

    ¿Quién ante esas voces y esos titanes negros de la NBA podría ser racista? ¿Quién tras Martin Luther King, Obama, nuestro padre Madiba o mi churri Beyoncé?

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  2. ¡Qué experiencia tan maravillosa, y tan bien descrita!!!.
    Me ha gustado lo del cambio de papeles entre blancos y negros del que fuiste testigo: como dice CrisC, se trata de justicia poética. Todo llega.
    ¡Qué preciosidad de voces todas las que cantan un gospel!!!

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  3. Maravillosa, sí, no es una más. Si cerrabas los ojos no podías imaginar más que voces negras, podías sentir su movimiento. Y también esa cosmovisión de un Dios alegre, no el temor de Dios, sino la fiesta, el ímpetu, la colectividad.

    Justicia poética. Tienes razón. Así me sentí yo: blanquito, casi nada.

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  4. Ya sabes que la música me apasiona. ¡Me hubiera encantado estar allí! Del Silvia´s he oído hablar mucho, ¡pero me encantaría que nos contaras un poco más!¡La comida es otra de mis perdiciones!¡Un abrazo!

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  5. Pues es difícil recordar con detalle.Pero era abundante y picaba mucho. Eso sì, a los USA no vayas por la comida.

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  6. esto... ¿seguro que comiste? jajaja ¡Cómo no vas a recordar! Jajaja... De verdad...¡Vas a dejar a "e", Coeliquore, CrisC y al resto de tus lectores con ganas de saber!¡Yo me incluyo! Jajaja... Debió ser el picante (: Me alegra un montón que disfrutaras de este viaje tantísimo. ¡Besos!

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    1. Pues, lo creas o no, es la verdad: no me acuerdo, pero sí que era muy picante, sustancioso y abundante. Y a esos que dices... pues que vayan, tú también.

      Y yo me alegro de tu vuelta, que tus sagaces y emotivos comentarios se echaban de menos por aquí. La plaza estaba como menos transitable. Gracias por volver.

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    2. :-) Gracias a ti, Atticus, siempre. En ningún momento dejé de leerte, a pesar de esta ausencia. Pero ya no me voy, de verdad de la buena. Por cierto,¡qué comentario te has marcado en mi blog! Me encanta. De nuevo, millones de gracias por tus palabras. Besos.

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    3. Uuuuuy... Eso de que ya no me voy... me lo han dicho demasiadas veces.

      Es una broma, claro. El comentario en tu blog lo hizo mi hermano listo: yo estoy de vacaciones y sólo escribo sandeces y banalidades. Olímpicas, eso sí.

      Besos for you.

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  7. Hace unos doce años yo estuve en una iglesia pentecostal en Austin, Texas. El pastor era un escritor muy conocido entre el pueblo evangélico, se llama Max Lucado. Los pentecostales, a diferencia de los bautistas, son mucho más ruidosos y extravagantes en sus formas. Pero no ponen pegas a la ropa y huyen del legalismo. En ese sentido, los bautistas son más conservadores. La música es muy parecida, aunque los pentecostales abren sus fronteras a todos los estilos, incluso al rock duro. En USA hay un grupo cristiano heavy muy conocido: Stripper. Es de los años 80 pero todavía tocan. Te preguntarás, Atticus, por qué te estoy contando esto. Porque, por los detalles que te han llamado la atención de esta iglesia que has visitado, me ha dado la impresión de que es la primera vez que has entrado a una iglesia evangélica. En España también las hay, y muchas, pero somos más reacios a entrar. Hay montones de denominaciones: sabatistas, metodistas... y la razón es porque se acepta la libre interpretación de la biblia. Esto no ocurre en la iglesia católica, dónde sólo hay una interpretación, la que recogen los catecismos. Vamos, que la interpretación del Papa y amigos es la que vale, a la tuya y a la mía que les den. Así también se evitan que se esparza el rebaño, también con el consecuente riesgo de sectas. Aunque, en mi humilde opinión, esto también la ha llevado a convertirse en una gran secta. Pero en fin, era la música lo que más nos interesaba. Yo llevo escuchando las mismas canciones católicas desde que era pequeña, que se pueden resumir en cuatro o cinco. Los evangélicos suelen componerse sus propias canciones en cada una de las iglesias. Y no sigo que me ha salido un post muy serio y muy largo. Es que nos has dejado abandonados muchos días. A partir de ahora prohibido cogerte tantas vacaciones seguidas...

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    1. Has dado en el clavo: no había estado en una iglesia evangélica en toda mi life. Es que yo, pese a que peino canas, he tenido una vida más bien sencillita y recogida, por lo que no dejo de sorprenderme cuando salgo de casa. Además, me molesta esa actitud del que viaja y parece que no se sorprende de nada ni aprende nada. Yo, por el contrario, soy muy turista y muy inocente.

      Te metes en un jardín del que no sé si sabrás salir como aparezcan por aquí los fundamentalistas. Aunque debo decirte que estoy de acuerdo contigo en casi todo. Uno de los grandes problemas de las religiones es la legitimación de la norma: al referirla a un supuesto dios (o a sus iluminados mediadores) desaparece la posibilidad de discusión o interpretación. Sin embargo, o bien admitimos que la palabra sagrada es, al menos en parte, interpretable (lo que conlleva graves problemas de coherencia interna: sagrado/profano) o incurrimos en un encastillamiento peligroso, pues no hay una única religión que se autoproclame la única verdadera.

      El mensaje unívoco unifica, qué duda cabe, pero también convierte a los fieles en rebaño acrítico. Siento decir en voz alta que gente a la que aprecio se ponen terriblemente nerviosos cuando haces una observación sobre su religión, e interpretan cualquier crítica como un ataque o una persecución. Son capaces de buscar argumentos que "verifiquen" sus creencias, pero se blindan ante cualquier otro que las "false". Supongo que eso es lo que significa -al menos para ellos- ser religioso. No para mí, desde luego: eso es ser obediente, sumiso, crédulo, disciplinado..., pero no espiritualmente rico.

      Una secta es un grupo minoritario alejado de la ortodoxia. La iglesia católica comenzó siendo una secta. Hoy no creo que se le pueda aplicar ese calificativo; en todo caso, hay comportamientos sectarios en muchos de sus miembros.

      Bueno, ya ves, yo también me meto en el jardín del que ya veremos como salimos. En todo caso, en este post pretendía glosar la música y la "puesta en escena" (si se puede llamar así), pero en absoluto descalificar ninguna práctica.

      Y ya no me voy. Entre otras cosas porque los euros han tocado a su fin. Comeré pasta y arroz lo que queda de verano.

      Otra cosa, Elena: abre un blog y cuéntanos cosas, que me sabe a poco lo que escribes y, al fin y al cabo, esto sirve para enterarnos de lo que hacemos y pensamos, de lo que estudiamos, de lo que vemos.

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  8. Gracias por animarme a abrir un blog. En cuanto se vayan de mi casa los albañiles, fontaneros, electricistas, pintores y demás intrusos, te prometo que me embarco en lo del blog. La promesa es más por mí que por ti, así, en caso de pereza o dejadez, no puedo hacerme la despistada. Una tiene que ser fiel a sus promesas si quiere que su palabra tenga algún valor. Tengo que reconocer que suelo frecuentar el facebook, y lo digo con la boca chica porque sé que para ti es lugar non grato. No es tan malo como crees, la mayoría de la gente con la que me relaciono se actualiza por este medio. Llega menos basura que al correo, si eres selectivo con tus amigos, claro. Pero también es cierto que es difícil encontrar observaciones tan agudas, boludeces tan cómicas y críticas tan profundas como las que encuentro en tu blog. Sin ánimo de comparar, Dios me libre. Soy consciente que si abro un blog sólo me leerás tú y hasta que te aburras, pero bueno, ya lo he prometido, no hay marcha atrás. Nos leemos.

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    1. Insisto: abre un blog. Entre otras cosas porque haces unos comentarios que son en sí mismos un post. A ver: escribes bien (eres capaz de usar el punto y coma, no acentúas la palabra "ti"...) y tienes ganas de decir cosas. Abre un blog. Básicamente hay dos plataformas: blogspot (a través de Google) y Wordpress. Pincha la lista de los blogs que sigo y verás alguna diferencia entre ellos. Y si exploras por la red verás que los hay monográficos y profesionales por un lado y, por el otro, personales. Cuidado con contar intimidades o indiscreciones, y usa siempre un nick. Respecto a lo de que no lo lee nadie... yo tengo unas 20.000 visitas por año. Y llegan desde sitios que no sé localizar en el mapa. Al final escriben unos pocos incondicionales y algún que otro esporádico. Otros están unas semanas y luego se van. Otros hacen un comentario y no vuelven. También hay amigos que te leen, pero que pudorosamente (¿por qué?)no escriben. Y otros enlazan a través de los blogs que frecuentas o que te frecuentan. Verás también que hay gente que escribe posts cada dos o tres días, otros más espaciadamente. Y los hay que dejan su blog en "stand by" una temporada. También lo puedes cerrar o dejar en barbecho.

      Lo que he dicho a veces de facebook es una broma. No lo uso, pero tampoco lo conozco. Lo poco que he visto me parece apresurado e instantáneo, y a mí me gusta reposar lo que escribo. De hecho, los comentarios los hago según salen pero no los posts: algunos tienen meses, incluso más de un año.

      Lo que sí que te dirá alguien es eso de "Cuánto te debes aburrir" o "Cómo se nota que tienes tiempo libre". Son esos que miran un partido tras otro en la tele, o que ven como los hombres y las mujeres, e incluso los viceversas, se despellejan. Son esos tan preocupados por la calidad del césped o por el tipo de harina que hay que poner al bizcocho. Quiero decir que cada cual elige en qué emplea su tiempo libre. Y dedicarlo a pensar despacio y a transcribirlo decentemente no me parece una tontería digna de desprecio.

      Echa de tu casa a todos esos obreros y ponte.

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  9. Ha de ser todo un espectaculo ver cantar eso en vivo ;D así deberían de ser todas las misas, muy alegres, no con un padre amenazando a los niños con portarse bien o se irán al infierno ;D

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    1. Bueno, cada cual elige su visión de Dios. Pero alegre sí que es, sí. Vistosa.

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