Hace unos años, pocos, Italia presentó a Eurovisión esta
maravillosa canción de Francesco Gabbani. El tema musical es un espectáculo de
diversión, ingenio… y también de análisis de una serie de gentes y posturas orientalizantes (en el peor sentido de la palabra), que se tragan todo lo que suene a
alternativo y espiritual (también en el peor sentido).
Una amiga me dijo hace poco que estaba encantada con el yoga,
que le hacía mucho bien, pero que tenía un serio problema con su profesora, que
era una de esas que niegan todo lo occidental, de las que dice que la culpa es
cosa del karma, que comienza la clase apelando a los horóscopos y, por
supuesto, que despotrica de las vacunas. Le mandé un enlace con esta canción.
Estoy recordando que Bertrand Russell escribió una Historia
de la Filosofía Occidental. No sé si es necesario el pleonasmo.
Me gusto la cancion. Te mando un beso.
ResponderEliminarMe alegro. Otro.
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