Vistas de página en total

martes, 30 de octubre de 2018

REUNIÓN



Este post está en obras.



Procedencia de la imagen:
https://movimientoprofesoralut.wordpress.com/2016/01/28/comunicado-asamblea-general-de-profesores-universidad-del-tolima/


sábado, 20 de octubre de 2018

APUNTE DE BAR


Tenían aspecto distinguido y cansado.

Venían -también yo- a indagar (¿a saber?) a un bar
de ésos que llaman de barrio, de toda la vida:
ésa que iba en serio para casi todos, aunque algunos
aún no sabían que existió Gil de Biedma.

Allí estábamos: en la vida exterior del que todo lo ignora.








Procedencia de la imagen:
http://www.kebuena.com.mx/2015/chiste-un-hombre-en-un-bar-25028.html

domingo, 7 de octubre de 2018

CUATRO FRASES EN UN CLAUSTRO


Este año, durante el siempre aburrido claustro inicial de curso, saqué unos folios en los que había anotado cuatro frases tomadas de la primera novela que he leído de Alicia Giménez Bartlett, pronunciadas/pensadas por la comisaria Petra Delicado. Mientras el runrún previsible y clonado de otros cursos se sucedía, a mí me dio por escribir sobre ellas, a partir de ellas.


1.     Sin testigos infamantes de la mediocridad. Nunca es posible. Por eso buscamos el silencio y la impunidad, nada tan bajo como la mediocridad, hasta el crimen precisa inteligencia y no una simple chapuza coyuntural dictada por instintos bajunos. Lo peor es que tantos mediocres exigen complicidades, testigos, de su bovino proceder.
2.     Yo podía subir o bajar por su escalera según me lo dictase el humor. No paro de dar vueltas a esta frase con el curso por delante. A veces tengo ganas de dar la batalla; otras, me enroco en el conocimiento de lo que sé que no se puede hacer y mi yo más zen entra en el silencio. Éste debería ser el camino, el otro me hace daño. Elegiré el error.
3.     Me compadecí de él, sus esfuerzos por convertir los prejuicios en argumentos. A esto sólo se puede decir: nada que añadir, señoría. Sin embargo, ese esfuerzo, cuando es sincero, convierte a sus actores en personas meritorias. Porque prejuicios tenemos todos y ser consciente de ellos es un primer y gran paso. Para trascenderlos, claro, no para apuntalarlos.
4.     La gente acepta mucho mejor las broncas que la frialdad educada.  Claro, el desprecio nos ningunea, mientras que el odio o el más vulgar rechazo nos hace alguien, algo. No existir, ser un gusano, sólo nos hace dignos del silencio, el olvido o la frialdad. Algo así como ser invisibles: no ser.

Procedencia de la imagen: https://ined21.com/claustro-profesores-sistema-amigo/