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viernes, 5 de julio de 2013

PLÁSTICOS Y BOLSAS

Fui al Eroski a comprar unas pocas cosas; me traje otras y casi ninguna coincidía con la lista que llevaba. Pero tenían fiambre al corte, lo que es cada vez menos frecuente. Bien: pido 150 gramos de pavo trufado (“Muy fino, por favor”: ni caso, luego dicen de los funcionarios) y otro tanto de salchichón. Veo que la empleada coloca las lonchas del pavo en una bandejita de plástico; antes de que prepare la otra le digo que puede ponerlo todo junto. Me responde que no, que cada cosa en su bandeja individual porque tiene que envolverlas (más plástico) para pegar una etiqueta en cada bandejita. La pieza de la que corta está protegida por un plástico que renuevan cada vez que alguien pide unas rodajas. Quiero también queso: dos vueltas de plástico en el semicurado y otras tantas en el brie, que ya lleva una especie de tapa de papel plastificado. Todo ello lo guarda en otra bolsa de plástico y me lo entrega con una estupenda sonrisa que vale más que el contenido plastificado. Sigo llenando de plásticos y comestibles mi cesta, me escandalizo con las falsas ofertas -si levantas el papel puedes comprobar que el precio original es el mismo- y a pagar. “¿Necesita bolsas?”, me pregunta la cajera. “Pueees… dos”. Me las entrega, paso un rato de incomodidad intentando abrirlas mientras siento tras de mí el aliento de una familia al completo, cuyo carro explica su corporeidad. Miro la nota: correcta. Las bolsas, 5 céntimos cada una. Todos los plásticos del interior son gratis: el plástico para salir asciende a 10 céntimos.

De ahí me marcho a El Corte Inglés. Voy a cambiar una camisa y de paso adquiero unos calcetines. Me dan la nueva y una bolsa reluciente. Le digo al trajeado dependiente que ya tengo, pero me insiste en una sin usar; “La vieja ya la tiramos nosotros”. Yo sigo empeñado y finalmente la coge como si estuviera pringosa y mete la camisa y el ticket dentro. Bajo al Hipercor. Intento dejar la bolsa con la ropa en atención al cliente: me remiten a unos cajoncitos que funcionan con un euro. Hay pocos y están todos llenos, así que me dirijo a la entrada, donde me indican amablemente que puedo optar por sellar la bolsa (con lo que la inutilizo) o introducirla en otra bolsa, de tal modo que la camisa se envuelve en su tercer plástico, si añadimos a las dos bolsas, el envoltorio con el que me la han dado. Lo hago.

Compro unas cervezas, un zumo, algo de pescado (que ponen en un buen trozo de papel -que pesan junto con los bichos y por lo tanto cobran a precio de pescado-, que a su vez envuelven en otro plástico). Voy a la caja. “Necesito una bolsa”: 5 céntimos. Le pregunto a la cajera por qué cuesta cinco céntimos y a tres metros te dan una gratis que además no sirve para nada; es más, no te dejan entrar si no plastificas gratuitamente lo que llevas, pero luego te cobran por el plástico con argumentos pseudoecológicos; además, las bolsas tienen agujeros y no valen para la basura. Me escucha, creo que está pensando que para la mierda de contrato y sueldo que tiene y va y el toca el imbécil del día: “Pues no sé, son normas de la empresa”.

Antes de irme paso por la parafarmacia y compro condones. Pienso que al final son plásticos que van envueltos en su correspondiente funda plástica individual, con sus instrucciones en un papel que supongo que todo el mundo lee antes-de; todo ello en su caja de cartón, que está precintada con algo que parece celofán. (Espero, queridos y queridas, que ya los tengáis preparaditos sin todas esas precauciones porque, de lo contrario, se os van a pasar las ganas cuando lleguéis por fin al cacharro profiláctico).

15 comentarios:

  1. ¿ Te pasa algo con el plástico, Atticus? Si es muy ligero y de muchos colores...

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    1. No sé si tu te ocupas de la basura. Yo tengo un cubito de apenas 5 litros. Tardo en llenarlo varios días. Pero lo que es plástico y papel... me pongo malo, lo siento.

      De las personas de plástico ni hablamos. Ni de las pelis de plástico, ni de los políticos plastificados, ni de los libros de dicho material, tan monos e insustanciales...

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  2. Por dios, Atticus, no vayas de supermercados…

    Mejor vete de pilinguis: pim, pam, pum: un baño checo, dos cigarritos, su poquito de conversación y reciclao el sistema.

    ¿Condones? ¿Y eso?

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    1. Perdona mi ignorancia: ¿qué es un baño checho?. ¿Y no vale sin cigarritos?

      (Lo de los condones era una licencia poética; ya expliqué en otro lugar que no compré una oferta porque caducaban en 2017. Además, hay cosas que no se adquieren en un gran almacén; por el precio, claro).

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  3. No me hubiese hecho falta leerlo. Vamos que ese periplo plastificado y esa indignación llevo años sintiéndola. Ese llegar a la caja y no poder decir: "le cambio 7 bolsas que me han puesto by the face por una con asas".
    ¡Que disfrutes de esos aros olímpicos envueltos en celofán que te has comprado ;)!

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    1. Yo también era de los que llevaba bolsas de casa cuando no se estilaba. Y en los supermercados con la murga de siempre: que si es gratis, coja las que quiera... Ahora de repente se han vuelto "ecologistas" y, en nombre del medio ambiente te soplan 5 céntimos por lo que, como dices, en el interior te ponen by the face.

      Si, como es mi caso, no puedes comprar una sandía entera porque me duraría una semana, y compras media, te encuentras con que no sólo va envuelta en un plástico, no, sino que ese plástico está metaplastificado ad infinitum.

      (Lo de los aros olímpicos tiene gracia, pero yo ni de colores ni de sabores: la fiesta está en la piel".

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  4. Pues sí, todos eso que cuentas es una barbaridad. Pero no lo entiendo, ¿no se supone que es supercontaminante? ¿ por qué lo usan entonces a mansalva? ¿por qué nos cobran unos sí y otros también? ¿quién se está beneficiando de todo esto?
    Jejeje...me ha gustado eso de que los condones son una licencia poética :P

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  5. Una licencia poética, ya te digo: ahí voy yo a comprar tal cosa a un gran almacén que se llama "Corte". Menudo riesgo...

    Se me escapa sobre todo ese bucle de por un sitio te regalo por otro te cobro.

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  6. Hoy, en "El País":

    http://smoda.elpais.com/articulos/vivir-sin-plastico/3593

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  7. Me ha parecido un texto muy bueno, Atticus. Has puesto palabras a una de las cuestiones más absurdas del supermercado. Es posible que las cámaras de seguridad no sean tales y, por el contrario, se visualicen como "gags" humorísticos en otros países del mundo... http://www.youtube.com/watch?v=y1RwVzt2LTQ ¿Por qué si no se nos queda la misma cara que a ellos cuando te dicen "son 5 céntimos", por favor?

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    1. Gracias. Ojalá fuera un gag. No creo. Te aseguro que sí he hecho la pregunta que planteaba en el texto, y me han contestado más o menos lo mismo: son normas de la empresa. Lo que me molesta sobremanera es que utilice el argumento de la ecología una empresa que derrocha energía, luces, plásticos, papeles... O será que soy un roñoso, que también.

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  8. Al hilo del artículo de El País recuerdo que existe una isla en el Pacífico (N) compuesta totalmente de plásticos, también llamada Sopa de Plástico. ¿Adivinas qué comen los peces que habitan por aquellos lares?

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    1. No conocía tal isla. ¿No bromeas? Claro que,ahora que lo dices, comerán... ¡croquetas de jamón ibérico!

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    2. No es broma, lleva años formándose y esta situada en mitad del Pacífico cerca de Hawai. Tiene una gran extensión.

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    3. Perdón por mi frivolidad anterior. Estaba mirando en internet, y es estremecedor. Sólo hay que ver en Imágenes de Google "Sopa de plástico" o direcciones como ésta: http://es.wikipedia.org/wiki/Isla_de_basura

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