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jueves, 18 de diciembre de 2025

GÉNEROS LITERARIOS

No teman. No hay voluntad de dar una clase, solo soy un profesor para el desguace.

Lo de hoy es para repasar mi relación con los géneros literarios. Al fin y al cabo, esto no deja de ser un lugar en el que escribir y a mí me gusta hacerlo razonablemente bien. Porque hay algunos blogs que dan vergüencita (de Twitter/X mejor ni hablo)...

Un blog pertenece mayoritariamente, creo, al ensayo. Algunos hay que son receptáculos de creaciones: narraciones breves, poemas... Recuerdo a una jovencísima Elvira Sastre en el suyo, donde ya se vislumbraba su talento. Ahora está en barbecho desde hace años y los comentarios están llenos de propuestas de estafas que nada tienen que ver con la literatura.

A mí el ensayo me gusta. Al fin y al cabo es mi profesión y mi formación. Es costoso, claro que sí, pero lo profundo no siempre puede escribirse en una taza de Mister Wonderful. Creo, como Ortega, que la claridad es la cortesía del filósofo. Siempre que se puede, por supuesto. La Crítica de la Razón Pura es un libro largo y difícil, me gustaría que fuese algo más accesible, pero también es cierto que exige una atención y una concentración que no solicitan otros textos más simplones.

Leo unos pocos cada año y consulto muchos. Tengo delante los Ensayos, de Montaigne, el padre de la palabra, aunque yo más bien atribuiría su invención a Aristóteles, si no antes. Platón tenía un punto narrativo y poético que me gusta especialmente, pero el ensayo es cosa de Aristóteles.

Leo sobre todo narrativa. Algún libro de relatos y muchas novelas. Al cabo del año repaso y veo que, del medio centenar de volúmenes completados, un ochenta por cierto son narrativa. Tal vez no he evolucionado demasiado, porque me encanta que me cuenten historias. También en el cine.

Teatro leído más bien poco. Lo pienso siempre representado y a la sala sí que voy. Tampoco todas las semanas, pero sí a media docena de representaciones cada año. Espero con impaciencia el momento de ir a Madrir a ver lo último de Juan Mayorga y de Javier Gomá.

La poesía es un género mayor. Suelo decir que es el pan de la literatura, el fundamento. Me gustaría escribir bien y eso significa escribir poesía, el lugar en el que las palabras pueden decir mucho más de lo que les está permitido en el diccionario. Poesía no es darle a la tecla enter. Tampoco consiste en escribir lo primero que te pasa por la cabeza. En poesía hay que conseguir que un mínimo de palabras expresen lo máximo. Ser un buen poeta no está al alcance de todos y yo me iré de este mundo siendo un aspirante.

Repaso un poco mi vida literaria. He publicado un par de libros de poesía. Uno de ellos muy juvenil, pido perdón por el atrevimiento. Hay, casi concluido, un tercero, que no sé cuándo verá la luz. También pergeñé un libro de relatos y seguramente terminaré en 2026 el próximo. En alguna revista literaria y en un volumen colectivo han aparecido textos míos: relatos y poemas. En el ensayo me he prodigado algo más: colaboré en un volumen colectivo y publiqué otro en solitario, así como algunos artículos en revistas especializadas que, por supuesto, no ha leído casi nadie. Pero no escribimos por eso, aunque deseemos lectores e interacción. Como aquí, qué duda cabe.

Esto parece un ridículum vitae. Así que igual es el momento de despedirse por hoy. Resumiendo: me gustaría ser poeta y en el mientras tanto hago lo que sé y puedo.



Procedencia de la imagen:

https://www.elauladepapeloxford.com/escribir-a-mano-ayuda-a-aprender-otras-habilidades-mas-rapidamente/


lunes, 8 de diciembre de 2025

CIVISMO


No conduzco demasiado, la verdad, así que esto únicamente tiene valor de anécdota. O no.

Iba a un gimnasio hasta hace poco y requería coche. Unas doce señales de STOP entre mi casa y el lugar. Apenas las respetaban dos o tres coches; en una ocasión vi a la policía (sin sirena) saltárselo y, claro, los coches que venían detrás hicieron lo mismo.

De las rotondas ni hablamos. Los intermitentes son decorativos, salir por el interior la costumbre y agobiar al que va a velocidad adecuada lo más común.

Ayer, al desaparcar, ya de noche, vi por la calle un patinete eléctrico. Menos mal, porque ni luces ni casco ni chaleco reflectante: dos jóvenes vestidos de oscuro montados en él, circulando por dirección prohibida. Frené en seco, me miraron mal. Pocos metros después, otro patinete, conducido por un preadolescente con un niño de no más de cinco años. Por la acera.

No menos malo fue el señor más o menos de mi edad que se puso a cruzar con el semáforo de peatones en rojo, lo que me obligó a un frenazo de los que hacen época. No me pude resistir: pité. Siguió cruzando indiferente.

Casi es anecdótico el automóvil que se paró en un puente de dos carriles. Porque sí. Generó atasco hasta que, al rato, decidió salir.

Menos mal que llegué a casa. Ah, los contenedores. Parece que los agujeros para las diferentes basuras son demasiado pequeños, de modo que mejor desparramamos las bolsas por fuera, rompemos unas cuantas y dejamos la porquería esparcida y, ya de paso, un sofá despanzurrado y la ropa que no queremos (hay un contenedor específico a cien metros).

Antes de llegar al portal debo detenerme porque un tipo ha decidido aparcar en la acera por la que voy, subir salvajemente a ella. Voy despacio, aposta, hago como que no le he visto. No se siente aludido. El coche sigue en la acera, rodeado de siete huecos.

Subo a mi piso. Pongo el telediario. Hablan de lo mal que está la política y pienso que es verdad: la polis está en peligro. La cives, eso que da lugar a la civilización, al civismo. O será la urbe, eso que deriva en urbanidad... Soy pesimista. Todos esos antropoides egoístas votan. Y hay muchos.


https://www.youtube.com/watch?v=gfHpWwWu-qY&list=RDgfHpWwWu-qY&start_radio=1



Procedencia de la imagen:

https://www.tusbuenasnoticias.com/noticias/educacion/2025/09/08/50171-civismo-como-ser-un-ciudadano-ejemplar-en-la-era-digital

sábado, 29 de noviembre de 2025

‘YA NO SÉ LO QUE ESTÁ BIEN’

La frase que da título a este post la pronuncia Ingrid Bergman en Casablanca.

Mientras plancho, suelo poner una película que ya he visto, una de esas clásicas por las que no pasa en tiempo. El día 26 de noviembre de 1942, hace 83 años, se estrenó Casablanca, esa joya inaudita, repleta de improvisación y de un guion que se escribía cada noche en el hotel. Por alguna razón (maravillosa) salió casi perfecta.

Hoy me he fijado en unas cuestiones morales. En primer lugar, la pareja de búlgaros que están huyendo de los horrores de la guerra, del nazismo que se ha enseñoreado de su país. Ella va a ver a Rick, le da a entender que está dispuesta a entregar su cuerpo al jefe de policía Renault a cambio de salvoconductos o dinero para adquirirlos y le plantea si cree que cumplirá con su palabra. El marido reciente, por su parte, está jugándose el poco dinero que tienen a la ruleta. Pierde, por supuesto. Rick acude en su auxilio: dos veces la bola cae casualmente en el 22: “Recoja su dinero, márchense y no vuelvan por aquí”. Todo el mundo se da cuenta del engaño y de la acción de Rick: el alemán que pregunta si es un lugar honesto, el barman y el camarero ruso que besa a Rick (“Aparta, ruso loco”, le dice el dueño del local).

Ella le ha preguntado si cree que su marido la perdonará. Le ama sobre todas las cosas y la situación es extrema. No puedo dejar de compararla con la joven que llega al bar con un alemán: ha de sobrevivir, es lo que se denominó una colaboracionista horizontal. Sin embargo, unos minutos después canta con frenesí “La marsellesa” y grita vivas a Francia. Otra perdedora, otra superviviente, como tantos a los que no se debería reprochar nada, mucho menos hacerles lo que se les hizo.

Ingrid Bergman (Ilsa) estuvo enamorada de Rick en París, cuando este era Richard. Creía que su marido Victor, el héroe de la resistencia, había muerto y, cuando le informaron de que no era así, dejó su historia de amor por el deber de seguir a quien también amaba, tal vez de otro modo. Pero en el bar se reaviva la pasión sin que el deber matrimonial mengüe. Ilsa está dispuesta a quedarse con Rick, a ser infiel, ya no sabe lo que está bien. El deber la golpea y el placer la requiere.

Casablanca es una película política. También una historia en la que placer y deber se enfrentan. El dolor de esas mujeres infieles (o casi) no hay que juzgarlo: son seres humanos que se debaten entre valores incompatibles, todos lo somos y alguna vez en la vida no hemos sabido qué está bien y qué está mal.

Me he acordado mientras la veía de otra película, reciente, mucho más floja: Una proposición indecente. Todo lo que hay en esta lo contemplamos en unos minutos en Casablanca y mucho mejor.

Por cierto, como ya he dicho, estaba planchando. Pero sonó el himno y me retiré de la tabla para escuchar con respeto y estremecimiento. De nuevo, siempre.


Secuencia del himno:

https://www.youtube.com/watch?v=-aUUoSWzLxg



Procedencia de las imágenes:

https://www.wiriko.org/cine-audiovisuales/las-cinco-razones-para-odiar-casablanca/

https://www.elmundo.es/papel/cultura/2017/11/19/5a10570046163f05098b45ed.html

sábado, 22 de noviembre de 2025

‘BAUMGARTNER’

Acabo de terminar Baumgartner. Empecé con muchas ganas, la historia me parecía estupenda. En su primer terció disfruté, devoré la narración. Pensé que Auster se despedía con la obra que, por el momento más estaba disfrutando. Porque he leído unas cuantas; sin embargo, no puedo recordar ninguna con entusiasmo, no hay una sola que haya dejado en mí ese poso que depositan algunos libros esenciales. Si tuviera que elegir, me quedaría con el guion de Smoke. Lo he intentado, de verdad, todo el mundo me hablaba maravillas de este escritor. Y no las niego, simplemente no reconozco en lo que he leído tales méritos objetivos. O será que, como ocurre a menudo, no ha escrito para mí, no me concierne tanto como otros.

De cualquier modo, leedlo, a ver si soy yo.

Una vez pasado el primer tercio, Auster hace entrar en escena a muchos personajes, todos ellos interesantísimos (Judith, Beatrix, Flores, Papadopoulos...), pero me parecen bastante desdibujados, como en una neblina en la que esos personajes (¿demasiados?) flotasen sin que veamos desarrollo. Promete pero no hay demasiado más.

En resumen, creo que el tema es el de la soledad, lo que me interesa muchísimo, pero... Demasiados peros, creo que al libro le faltan páginas o le sobran personajes y subtramas. Más aún cuando Auster se adentra en la historia de los Baumgartner/Auster (porque es más él que nadie).

Sé que fue su último libro, tal vez la enfermedad no le permitió desarrollarlo. Esos datos se me escapan. Me quedo con ganas de más.


Ah, recordatorio: leed este post:

https://nomadassquare.blogspot.com/2025/11/pero-no-te-olvides.html



Procedencia de la imagen:

https://www.planetadelibros.com/libro-baumgartner/392176

jueves, 13 de noviembre de 2025

PELÍCULAS SOBRE FREUD

Ayer vi La última sesión de Freud (Matt Brown, 2023). Me gustó, pero rumiando un poco me doy cuenta de que no tanto. Cuenta la historia de una conversación (posible, no está documentada, es una licencia tal vez) entre el célebre doctor y C. S. Lewis, el autor deLas crónicas de Narnia. No se sabe muy bien por qué llama Freud a Lewis, pero este acude y charlan, presuntamente sobre religión, sobre la existencia de Dios: ¿es una construcción neurótica propia de un estadio infantil o, por el contrario, una necesidad de sentido? Me hubiera encantado que la película fuera sobre eso, pero el asunto es tratado de modo superficial con frecuentes digresiones que, la verdad, no vienen muy al caso: la hija Anna, su relación con Dorothy, el doctor que quiere establecer una relación con ella, el análisis que hace Freud a su hija... Distracciones. Lo que sí me gusta, por supuesto, es la ambientación, en el Londres de los primeros días de 1939, con la Segunda Guerra Mundial recién inciada y Freud en sus últimos días de vida. Los actores cumplen y me creo a Anthony Hopkins en el papel protagonista, aunque no sea su mejor interpretación. Quedan demasiados hijos sueltos, no es una película redonda, pudo ser mejor.

Me gustó más Un método peligroso (David Cronemberg, 2011), con Viggo Mortensen haciendo con notable competencia de Freud. Cuenta la relación entre tres personas, pero lo que más me interesa es la que se muestra entre Freud y Jung. Aquí si veo interés en respetar la historia (con sus licencias, por supuesto).

El vendedor de tabaco (Nikolaus Leitner, 2018) no me gustó nada. Desperdicia una historia excelente y convierte a Freud en una especie de confidente de un empleado del estanco en el que compra tabaco. Otra oportunidad desaprovechada, pese a que es Bruno Ganz el que se hace con la figura de Freud.

La serie Freud (Marvin Kren, 2020) es especialmente lamentable. Han convertido al padre del psicoanálisis en una especie de detective que colabora con una medium para resolver crímenes y conspiraciones. Caótica, indigerible, tramposa. Solo merece la pena, como en otras, la ambientación y la recreación de Viena.

Hay muchas más, algunas no las hemos visto en España. No obstante, por no ser muy chinche, voy a recomendad dos clásicos, ahí voy sobre seguro: Elemental, Dr. Freud (Herbert Ross, 1976) y Freud, pasión secreta (John Huston, 1962). Que aproveche.



Procedencia de las imágenes:

https://www.selecta-vision.com/catalogos/la-ultima-sesion-de-freud/

https://www.filmaffinity.com/es/film382228.html

https://www.cineypsicologia.com/2016/10/la-pasion-secreta-de-freud-freud-john.html



miércoles, 5 de noviembre de 2025

PERO NO TE OLVIDES...

Hoy traigo un post distinto.

El 29 de octubre de 2024 una dana destruyó pueblos, campos y, lo que es más importante, la vida de más de 200 personas. Un año ha pasado y en este tiempo hemos oído de todo. No voy a incidir en responsabilidades y negligencias, que para mí están claras. Lo que quiero hoy es deciros que hay una iniciativa solidaria que tiene que ver con la literatura. Se trata de la publicación de un libro cuyos beneficios irán a parar a la biblioteca de un colegio público de Sedaví. Participo modestamente con algún texto. Obviamente, para que tenga éxito y el dinero llegue a la biblioteca, es preciso que se vendan los libros.

Están cerca de la mitad, el proyecto peligra. Por eso lo traigo aquí: es imprescindible la labor de mecenazgo (crowdfunding, lo llaman también). Al final de este post tenéis toda la información.

Perdonad que utilice mi blog para hacer publicidad, pero creo que merece la pena. Si no estáis en situación de gastar 20 €, al menos dadle toda la visibilidad que podáis.

Gracias.


https://www.verkami.com/projects/41978-pero-no-te-olvides-de-valencia?fbclid=IwY2xjawN37MFleHRuA2FlbQIxMQBzcnRjBmFwcF9pZBAyMjIwMzkxNzg4MjAwODkyAAEeOYqdhNK12kdgVotDkAMxorQxDbQHcpgIb6tU1yWEDBHLKlUT0D8b1eCr9MQ_aem_ZSsn6ys9QKrugnmfzS0jdw