Vistas de página en total

sábado, 20 de febrero de 2010

NE ME QUITTE PAS

Estudiaba servidor de ustedes 3º de BUP, y estudiaba francés, que es el idioma que cursaban las personas “normales”. Un día llegó la profesora (lo siento no recuerdo su nombre: era tan mala docente que mi generoso pudor lo ha olvidado) y nos dijo que Jacques Brel acababa de morir. Yo, naturalmente, no sabía a mis 16 añitos que tal individuo existiera. Pero la profesora nos puso un cassette (los más jóvenes pueden encontrar información al respecto en los libros de prehistoria) y nos dio un folio con la letra. Era “Ne me quitte pas”.

No necesité saber más, la escuché, una vez, otra, la entendí, la disfruté. Le he escuchado cientos, miles de veces desde entonces. Es la canción más triste, más mendicante, más cobarde en su desesperación amorosa, que he oído nunca. También la más bella.

Con la llegada de Youtube he podido ver a Jacques Brel en grabaciones muy antiguas, en primeros planos, con lágrimas en los ojos. Un año atrás enseñé a una “niña” (no había cumplido los 30) esos vídeos. Se rió. Dios la perdone; probablemente nunca dijo a nadie “No me dejes”, jamás supo lo que significa ese dolor.

8 comentarios:

  1. No conozco la letra…, pero no me “acaba” del todo. Quizás por lo que dices de ese tono lastimero. O por ese "eggegeggeoggg" de Brel, la Piaf o la Greco y algunos otros. O a saber.

    Pero me gustó mucho una suya que oí hace lustros: “Dans le port d’Amsterdam”.

    No soy muy de la canción francesa, pero tiene canciones soberbias y maravillosas; algunas de Charles Trenet, como “L'âme des poètes (Longtemps, ...)”, “La mer” o aquella otra que Truffaut pone en Besos robados: “Que reste-t-il de nos amours?”. O cualquier versión de “Le temps de cerises”. Obras maestras.

    www.youtube.com/watch?v=UZUDJwgmvOc

    La niña dirá, le dirán, oirá decir “ne me quitte pas”. No perdonará a Dios.

    ResponderEliminar
  2. En una plaza de Bruselas, un domingo por la mañana, vi discos de Jacques Brel en un mercadillo de cosas usadas. Estaban en el suelo junto a un viejo gramófono. Acudimos a esa plaza en busca de un puesto donde hacían, según la guía, las mejores patatas fritas de la ciudad. No la encontramos, pero a cambio descubrimos una hermosa plaza repleta de objetos del pasado. El hombre del gramófono miraba con ojos del pasado un presente que ya no era el suyo. "Todo sucede por primera vez pero de un modo eterno". Díselo a la niña la próxima vez que la veas.

    ResponderEliminar
  3. Lo siento CrisCrac. En esto no podemos estar de acuerdo. No me gusta Brel en su totalidad, pero sí esta hermosa canción a la que vuelvo siempre cargado de melancolía y que abandono cubierto de tristeza. Necesito a veces de la canción francesa cuando no aguanto más tanta banalidad en inglés. (Sí, ya sé, todo esto es simplista).

    No sé lo de la niña. No sé.

    ResponderEliminar
  4. Signos, no has escrito un comentario, sino un microrrelato. Extiéndelo un poco, maestro, aquí hay un post.

    Creo que le dije cosas como esas, pero ya no me acuerdo, o mo quiero recordar. De todos modos, no hay próxima vez, a menudo el silencio vela el pasado y hacemos como que nada hubo, fingimos que el pasado fue otro. Y eso parece valer.

    ResponderEliminar
  5. Gracias, Atticus. La verdad es que llevaba aquella imagen desde hace mucho tiempo en la memoria: el tipo aquel del mercadillo, con su gramófono y sus discos de Brel, tenía pinta de haber sido músico o actor secundario en alguna película de Truffaut. También recuerdo un cartel grande de Brel que anunciaba una exposición sobre su figura. Sin duda, Bruselas merecería un post. Y otra visita. Díselo a alguna niña.

    ResponderEliminar
  6. No, si a Bruselas iré. Por esas razones o por otras. Se lo diré a alguna niña, pero no a cualquier niña. Yo no me voy con cualquiera. No sé si preguntar a través del blog, igual viene quien no pienso ni quiero.

    Una de las que esto lee puede escribir sobre Bruselas. Ánimo, que conoces bien la ciudad.

    Porque Brel nació en Bélgica. Y los franceses, con esta industria que hace francés todo lo que está cerca de Francia, o es en francés, ha hecho de Brel un cantante francés. Igual que con Hergé, Picasso y tantos otros.

    ResponderEliminar
  7. El dolor es asunto jodido, pero a veces hace más sabio.

    Quien sabe de dolor, dice el proverbio, todo lo sabe.

    Venga una nietzscheana: duele, ésa, la Vida. Que venga cuantas veces quiera. Y que no se pase, que aunque se espere un piquito ricosón con sabor a toblerone, "la" damos en la boca una leche..., entiéndase como se quiera.

    ¿Cómo va, primo, la resaca turca?

    ResponderEliminar
  8. Es curioso, CrisCrac. La resaca turca. Mañana pongo nuevo post y hablo de eso, de la resaca turca. Y, como podrás imaginar, algo se dice, pero lo que de verdad importa es lo que no se dice.

    El dolor es jodido, sí. Y se aprende, qué remedio. Pero no siempre. Y así estamos. Qué razón, don Federico.

    ResponderEliminar

Puedes escribir tu comentario. Agradezco la inteligencia, la educación y el sentido del humor. Por favor, no enlacéis páginas con contenido comercial, religioso o político. Tampoco las que claramente constituyen una estafa.