25 años. Hoy hace un cuarto de
siglo desde que se fue Rita Hayworth.
Mi madre me contaba que el párroco
de la pequeña capital de provincias en la que vivía iba a la taquilla del cine
a recordar a sus feligreses que, si sacaban la entrada, incurrían en pecado
mortal. La película era 3-R: mayores con reparos
Y ahora, volviéndola a ver tantos
años después, creo que tenía razón. En esta escena vive la pasión pura. Aquel
curilla sabía dónde latía el erotismo.
Yo no le veo nada malo a la escena. Erostismo: sí, pero he visto cosas peores. A lo mejor lo que no quería el cura que vieran es el guantazo que le endiña el maromo. Aunque antes, pegar a una mujer podía ser símbolo de hombría. ¿ quién sabe? Como ella dice en la canción: La culpa es suya. Por supuesto, yo no pienso lo mismo.
ResponderEliminar¿Cómo que no le ves nada malo? Hay condenación eterna en cada uno de sus parpadeos, en la envolvente melodía casi coital, en sus caderas (en las que, dijo aquél, no se pone el sol). Hay pecado mortal en su escote palabra de honor (palabra de honor que si lo pillase...). Lo del guantazo no pertenece a la escena que me gusta y sí al género de los horrores. Los hombres de bien deseamos a semejante mujer, pero babeando (eso sí, babeando poéticamente) al mismo tiempo que aborrecemos las bofetadas y más aún a sus autores. No confundamos.
EliminarMira la escena con otros ojos, Rachel. Dices: "Erotismo: sí, pero he visto cosas peores"; peor que el erotismo es todo. Espero explicarme bien. Eros es deseo, o sea, Rita Haiworth.
¡Cuántas veces habré intentado emular esa escena, con y sin público...!!!!!!!
ResponderEliminarEn cambio, la bofetada pone los pelos de punta, pero he de decir que vi la peli tiempo ha y no la recordaba (¿ésa será la primera escena famosa?):oh my god!!!!!
En el pueblo de mi madre, aparte de advertirles, el cura entraba en el cine y ponía su mano ante el proyector para ocultar las imágenes que él consideraba pecado.
El cura era uno de tantos, un "pacorro" más que un párroco. Me recuerda al de "Cinema Paradiso".
EliminarUn día pones un vídeo, que seguro que mejoras aquí a la Margarita.
Jejeje, lo que quería ese curilla, Coe, era pase privado desde la sala de máquinas para su divertimento :P jajaja
EliminarComo el de "Cinema paradiso", sí, a mí la historia me parece la misma. Es que nuestra Historia es muy similar.
EliminarDoy Fe!! Es el erotismo en persona, destilado por cada poro de la piel!!
ResponderEliminarCuerpo y rostro danzando al mismo compás. Una obra de arte!
No, Kriss, de fe nada: la pura realidad palpable y material: el ser y el parecer, el dasein, el to on.
Eliminar::: me cuesta hallarle el erotismo a la chica, no consigo abstraerme de una estética que no me pertenece y que contemplo con algo de extrañeza: no sé si me explico, quiero decir que comprendo intelectualmente que es bella pero no acabo de sentirlo "in my flesh"
ResponderEliminarla bofetada artificiosa de glenn ford es interpretable de muchas maneras, no me refiero a un psicoanálisis de baratillo, sino de un modo algo más poético y audaz: no la violencia, claro está, pero sí la fuerza, que forma parte del choque de trenes que es el deseo, el verdadero, el que no puede controlarse porque su pulso es telúrico, enigmático, devorador: dionisos
"melodía casi coital", "pecado mortal en su escote", "babeando"..., joé, Atticus, el Obispo de ahí te va a aplicar, con efectos retroactivos, una فتوى fatwā que pa qué (Rachel, Coeliq, Kriss..., no me lo jaleéis, que me lo veo en Guantánamo vestido de butanero) :::
Pues no sé qué decirte. Si no le encuentras el punto... pues casi que déjalo. Para otros. Porque a mí me parece que aquí hay un erotismo tautológico. Pero si no te pone... pues eso.
EliminarEl obispo me va a meter en vereda, cierto, aunque para pecador logorreico himself. Fatwas a mi. Con un escote así me paso yo a Guantánamo por el forro de... los guantes de Rita Haiworth.
Y al Glenn Ford que lo cuelguen con los mismísimos guantes por salva sea la parte.
Lo que me llama la atención de estas películas es lo desequilibradas que parecen siempre las mujeres y el traje de aparente sensatez con el que se viste a los hombres cuando el amor causa profundos disturbios en ambos. Quizá por ello digo lo de aparente. Él también enloquece.
ResponderEliminarMe gusta la seguridad en sí misma que ella muestra mientras canta y baila.Creo que de ahí emana todo el juego de seducción. Creo que la seguridad y el arrojo son cualidades que atraen. Pero, sobretodo, me gusta el corte de los vestidos, la exaltación de la figura femenina. Adoro los vestidos, me encantan. Son mi prenda favorita.
Como dijo nosequién: "Los vestidos estan hechos para ser llevados por mujeres que sonríen" :)
EliminarEso de la sensatez y el desequilibrio... depende. A mí el me parece un pelele. Aunque es quién pega la bofetada, en realidad es una marioneta, no sabe dónde está, el trabajo y la mujer, todo le queda grande.
EliminarLos vestidos... ay. Para ser llevados, lucidos, sonreídos, devorados, deseados... Tanto o más que el relleno. Sobre todo si sonríen.
Sí, tienes razón respecto a él. En mi comentario me refería al perfil general que se da a los potagonistas en las películas de ese momento. Y, en esta en concreto, completamente de acuerdo contigo, le queda grande. Un saludo!
EliminarEl erotismo de la escena es indiscutible. De hecho es un buen ejemplo de cómo 'menos es más' en cuestión de seducción. Una lección que no vendría mal a los que, como yo, nos hemos criado desde la época del destape a esta parte, y nos hemos acostumbrado (y casi hastiado) de las escenas de muestreo de chicha descarada. Hoy en día el erotismo solo está en los anuncios de perfumes... bueno, y también de productos de limpieza quita-grasas. No deja de ser curioso...
ResponderEliminarBueno, Silvia, yo contra el destape no tengo nada. Y eso de que sugerir es mejor que mostrar... a alguno que yo me sé le mostraba el camino del exilio más que sugerírselo. Pero es verdad que muchas veces la exhibición de la carne es tan parecido al erotismo como el escaparate de una ferretería. Según y cómo. Y quién. Y a quién. Ya veis que a CrisC no le dice nada este peaso mujé...
EliminarA mi hermano tampoco le dice mucho. Siempre que ha visto esta escena hay momentos en los que le parece algo arrítmica aunque, eso sí, muy fashion. Así que sí, sobre gustos, luces que no colores (o ángulos, según nos pongamos de pejigueras). Un saludo para todos.
EliminarTu hermano... otro rarito. En fin, Pilarín. Pero un día explica eso de los ángulos y las luces.
Eliminar¿Arrítmica?
Sí, casi mejor otro día, jajaja. Que es un poco largo y vais a pensar que estoy un poco regadera!! Jajaja... Lo que sí me gustaría añadir es el excelente trabajo de Anita Ellis. A continuación os adjunto un enlace donde interpreta un clásico del jazz que habréis podido oír en otras voces (como la de Billie Holiday).
Eliminarhttp://www.youtube.com/watch?v=0_YcjPp5oPM
PD: sobre lo de arrítmica... ahí no me pronuncio, no sé si soy el más indicado para hablar de ello, seguramente no. Lo que sí está claro es que esta escena debe tener algo para que siga en la retina de cada nueva generación que viene al mundo aunque no conozcan la película. Y, por otro lado, ya me gustaría a mí que tras 25 años de mi muerte alguien me dedicara un post! Qué digo un post! Con una palabra me bastaría!Jajaja... ¿Alguien se acordará de mí?
EliminarPues lo de un poco regadera... tú misma. Aquí el personal se dedica a ilustrar al loco Carioco que regenta el asunto. Cuando quieras.
EliminarY lo que dices en el segundo comentario... seguro que sí hay alguien que te escriba un post, un panfleto, un soneto y hasta una enciclopedia. Era el coronel el que no tenía quién le escribiera.
For you http://www.youtube.com/watch?NR=1&v=H-ojq4YyhUg&feature=endscreen
ResponderEliminarMmmmm... Para comérsela. A Rita. Esta hermosa hasta en el último fotograma.
EliminarRespecto a la música... maravillosa. Dan ganas de prepararse un baño con esencias, velas aromáticas y buena compañía... y repetir la canción una y otra vez. Deliciosa.
Thanks a lot.